Como es habitual, el pasado 12 de junio  Unicef y la OIT (Organización Internacional del Trabajo) conmemoraron el día mundial contra el trabajo infantil. Ambos organismos pertenecientes a las naciones unidas mostraron cifras y estudios que alertan y horrorizan,  sobre todo si de nuestra niñez se trata. Si despejamos las cifras  tal cual  abrimos las ramas para mirar dentro del bosque y empezar a preguntarnos sobre el tema, sus causas, sus consecuencias y sus múltiples realidades, este entra sanamente en discusión.

Entonces, ¿Qué es el trabajo infantil? ¿Es lo mismo que explotación? ¿Participa nuestra niñez en la toma de decisiones de las políticas que las y los contiene? ¿Es escuchada la voz de los niños y niñas trabajadorxs? estas y otras preguntas surgen a partir de adentrarnos en otra mirada, en otra forma de abordar la realidad del trabajo infantil que interpela al discurso de los organismos oficiales ya que éstos no conllevan la participación de la niñez trabajadora.

En Latinoamérica existe desde hace 40 años una organización de niñas y niños trabajadorxs, el MOLACNATS (El Movimiento Latinoamericano y del Caribe de niños, niñas y adolescentes trabajadores)  que lucha por  la dignidad de los niños, niñas y adolescentes trabajadorxs, defendiendo sus derechos y promoviendo el protagonismo  de toda la infancia. En un comunicado del pasado 12 de junio el MOLACNATS rechazó el día contra el trabajo infantil y  allí manifestó: ” Queremos expresar nuestro rechazo a este día mundial de erradicación del trabajo infantil porque criminaliza a los niños, niñas y adolescentes trabajadores de los sectores populares, criminaliza la pobreza y el trabajo”.

Seguramente podrán surgir opiniones y visiones encontradas en relación al trabajo infantil y su erradicación, lo que no se puede obviar es que en esta discusión no pueden quedar afuera sus principales protagonistas es decir, los niños, niñas y adolescentes. En relación a esto el comunicado plantea: “Esta fecha es promovida e impuesta por la OIT y organismos internacionales de adultos, que NO escuchan nuestra voz, negando nuestra capacidad y nuestros derechos como sujetos protagónicos y activos como lo estipula la Convención sobre los derechos del niño para ejercer un trabajo digno y tener una mejor calidad de vida, tener un buen vivir”.

En nuestra provincia existe La Veleta y La Antena,  una organización que forma parte del MOLCANTS, con impronta de adultos pero con la finalidad de brindar información a Niños, Niñas y Adolescentes e intercambiar aprendizajes de manera que éstos puedan asumir su participación protagónica, y los adultos su rol de colaborador o consultor de los mismos. La misma busca promover el protagonismo, el desarrollo social y la participación política de NNyA en Ugarteche.

Para seguir conociendo más al   MOLCANTAS y sus premisas en relación al trabajo infantil, desde 5 pal peso conversamos con Cecilia Robert especialista y colaboradora de la Veleta y la Antena.

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