Cambios en la cobertura de medicamentos para jubilados y jubiladas

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Desde el inicio de la semana, el escenario para los jubilados y jubiladas en Argentina ha cambiado significativamente. A partir de decisiones impulsadas por el Gobierno Nacional, liderado por Javier Milei, la cobertura al 100% de medicamentos esenciales ha sido restringida, generando un debate profundo sobre el impacto que esto tendrá en uno de los sectores más vulnerables de la población.

Un nuevo sistema de requisitos

Hasta hace poco, los jubilados gozaban de la cobertura completa de ciertos medicamentos esenciales bajo el Programa de Asistencia Médica Integral del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (PAMI), una política que garantizaba el acceso a tratamientos vitales sin costos adicionales. Sin embargo, las nuevas normativas implican que solo aquellos que cumplan con estrictos requisitos podrán mantener este beneficio. Entre estos requisitos destacan:

  • Percibir la jubilación mínima, actualmente establecida en 252.798,48 pesos mensuales.
  • No contar con cobertura médica privada (prepagas).
  • No poseer vehículos con una antigüedad menor a 10 años ni propiedades consideradas de lujo, como embarcaciones o aeronaves.
  • No ser titular activo de sociedades comerciales ni percibir ingresos adicionales significativos.

La implementación de estas condiciones recuerda a los criterios establecidos para el acceso a subsidios de servicios públicos, lo que ha generado críticas por considerarlos burocráticos y excluyentes.

Impacto en los jubilados

Esta nueva política puede dejar a una gran cantidad de jubilados sin acceso a medicamentos esenciales. La situación es particularmente preocupante si se considera que el costo de estos medicamentos suele ser inaccesible para quienes perciben la jubilación mínima.

Por ejemplo, se estima que la canasta básica de los adultos mayores, que incluye alimentos, alquiler, servicios y medicamentos, supera ampliamente los ingresos de una jubilación mínima. Esto significa que muchos jubilados no solo enfrentan dificultades para acceder a tratamientos médicos, sino también para cubrir otras necesidades básicas.

Un sistema de subsidios graduales

El Gobierno ha establecido un sistema alternativo de subsidios que contempla coberturas parciales del 50%, 60%, 80% o 100%, dependiendo de la evaluación socioeconómica de cada solicitante. Para acceder a este sistema, los jubilados deberán realizar un trámite que incluye los siguientes pasos:

  1. Inscripción virtual o presencial: Los interesados deben registrarse a través de la página web del PAMI o acudir a una oficina cercana con toda la documentación necesaria.
  2. Documentación obligatoria:
    • Documento Nacional de Identidad.
    • Receta Electrónica de la medicación solicitada. Esta debe ser emitida por el médico de cabecera o especialista y contar con el diagnóstico que da origen a la prestación, en forma detallada o con codificación de la CIE-10 (Clasificación Internacional de Enfermedades, décima versión).
    • Declaración jurada: En caso de necesitar más de 4 medicamentos por Subsidio Social, el afiliado debe presentar el formulario de medicamentos firmado por su médico de PAMI en su agencia designada.
  3. Renovación mensual: Para mantener el subsidio, los beneficiarios deben presentar recetas actualizadas cada mes.

El trámite puede hacerlo un afiliado o un apoderado, pero aun así representa un desafío para aquellas personas con poca familiaridad con las tecnologías o dificultades de movilidad.

Repercusiones sociales y económicas

Esta política constituye un ataque directo contra los derechos de los jubilados. Además, las nuevas disposiciones no toman en cuenta la realidad socioeconómica de un país donde la pobreza afecta a un porcentaje significativo de la población mayor.

El acceso a medicamentos es un derecho fundamental, especialmente para los adultos mayores, quienes suelen requerir tratamientos constantes para mantener una buena calidad de vida. Las recientes modificaciones en la cobertura del PAMI representan un desafío no solo para los jubilados, sino también para el tejido social y económico del país.

Es fundamental que el Gobierno revise estas políticas para evitar agravar la situación de uno de los sectores más vulnerables de la población. Mientras tanto, es importante el apoyo de las familias y comunidades a los adultos mayores en el proceso de adaptación a este nuevo sistema, asegurándose de que puedan acceder a los beneficios que aún les corresponden.